Richard tiene padre americano y madre española. Vivía en Cádiz. Su padre era marine de los Estados Unidos, país al que marchó y vivió parte de su adolescencia. Después volvió a España, donde ya lleva viviendo unos nueve años.
En los Estados Unidos la adaptación fue complicada, y cuando volvió tampoco lo tuvo fácil. Una vez en Cataluña, tuvo que enfrentarse a otra lengua, el catalán, pero lo aprendió rápido. Aquí, abandonó todos los estudios y no sabía qué hacer con su vida.
Ahora todo ha cambiado. “He acabado hace poco una formación de recepcionista y telefonista. Y he acabado INSERsport”, explica satisfecho. Este verano le servirá para descansar y jugar con sus amigos a fútbol. Es el deporte que más le gusta. Con el programa ha conseguido la certificación de árbitro de fútbol sala de la Federación Catalana de Fútbol Sala. “Estoy aprovechando más las oportunidades de estudios y trabajo, y tengo ganas de aprender. Antes no estudiaba”, confiesa.
“INSERsport te da oportunidades. Por primera vez podré ganar algo trabajando”, remata en Richard.